Las demandas de Azerbaiyán
En diciembre de 2022, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Azerbaiyán exigió a Ruben Vardanyan que abandonara Nagorno-Karabaj. Vardanyan respondió a la “crisis humanitaria en toda regla” diciendo:
“Llevo 20 años viniendo a Artsaj (Nagorno-Karabaj). He puesto en marcha varios proyectos aquí, he organizado la restauración de una mezquita en Shusha. Tengo raíces en Artsaj, mi abuela nació aquí. Tengo una casa y no entiendo realmente por qué tengo que irme. Siempre he trabajado para que los habitantes de Artsaj y la República de Azerbaiyán pudieran vivir uno al lado del otro, pero no juntos. Esta es la única manera de evitar el conflicto”.
En febrero de 2023, el presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, declaró que la salida de Vardanyan de la región era un requisito previo para iniciar el diálogo con la comunidad armenia de Artsaj. Vardanyan fue entonces destituido de su cargo y el fiscal general de la república, Gurgen Nersisyan, fue nombrado en su lugar.
A pesar de ello, Ruben se negó a viajar desde la región y abandonar a los residentes armenios a su suerte.